Hace apenas algunos años estábamos cercanos a la Generación Net, nombre común que se le dio a las personas nacidas a principios de los años 1990 en Estados Unidos y occidente hasta el presente. Pero conforme pasa el tiempo, surgen nuevos avances tecnológicos y por consiguiente nuevas generaciones.
La Generación Net son niños que han estado manipulando computadoras desde una edad temprana. Esta generación, no conoció un mundo sin computadoras, como nuestra generación en la niñez, que solo conoció la televisión y el teléfono.
Se podría señalar que las generaciones presentes, no tienen un nombre sucesivo, pero cabe mencionar que han nacido y crecido con las últimas tecnologías; juegos de video muy interactivos, internet, sitios web, mensajería instantánea, teléfonos celulares con un sinfín de funciones y una variedad de dispositivos móviles.
No es inusual para estas generaciones de alumnos el realizar múltiples tareas usando herramientas de comunicación a la vez, sin dejar de navegar por la Web, lo cual plantea nuevos retos para los decentes.
El docente debe estar a la vanguardia, contar con esas competencias tecnológicas, somos facilitadores en el aula, por lo tanto, es importante que dominemos el uso de las herramientas tecnológicas. La figura del docente ante sus alumnos implica en cierta forma, un saber todo, los alumnos esperan aprender de sus conocimientos. La personalización de la tecnología en las aulas es fundamental, no es algo que tenemos que cambiar, sino algo que tenemos que adaptar a las necesidades de hoy en día.
La aplicación de la tecnología en ambientes de aprendizaje ayuda a los estudiantes a aprender más efectivamente y facilita más el trabajo de los docentes. Ya que tienen la oportunidad de interactuar con ordenadores familiares y desarrollar nuevas habilidades y prácticas escolares.
El uso de estos dispositivos suele ser una gran ventaja ya que puedes estar conectado a la red desde el lugar en que te encuentres, facilitando la comunicación e información y un sinfín de movimientos. Pero es cierto que si no se aprovechan los recursos como es debido, pueden ser distractores o posibles amenazas para un estudiante, tal es el caso de los teléfonos celulares y su relación con el fenómeno surgido en los últimos años conocidos como sexting, por mencionar solo uno de tantos ejemplos.
Desde una perspectiva curricular, deberían establecerse objetivos determinados en cuanto al uso de estas herramientas y fomentar en las diferentes asignaturas el uso consciente de las mismas, así como el provecho que podemos obtener de ellas y no solo enfocarse en la prohibición de estas. Por ejemplo diseñar clases en las que se plantee hacer uso de grabador de voz para una entrevista o usar el reproductor de video. La toma de imágenes en algún tema de investigación, usar estos recursos para autoevaluación y retroalimentación.
Hay que considerar que los alumnos tienen importantes expectativas en cuanto al uso de la tecnología para apoyar su aprendizaje. Por lo que estas expectativas van relacionadas al proceso de enseñanza. Considerando desde un paradigma cognitivo, debemos hacer atractivo este proceso para el alumno, lo que se quiere transmitir y por consecuencia estimular y guiar ese aprendizaje.
Desde una perspectiva constructivista, contamos con que el alumno, manipula diferentes tipos de dispositivos, los cuales aprende a utilizar individualmente, asocia nuevos conceptos a nuevas estructuras cognoscitivas. Aunque por otro lado las herramientas culturales permiten interactuar en diferentes contextos socioculturales y permite que el alumno desarrolle habilidades relacionadas con la participación social, promueven prácticas situadas dentro del trabajo escolar, a través de las cuales podemos realizar diversas tareas relacionadas a las necesidades actuales y al contexto.
Es un desafío el involucrar el uso de celulares en el proceso de enseñanza-aprendizaje, es algo que cada vez es más necesario e inevitable, pues forma parte de una práctica social. Sin embargo existen conflictos que se contraponen a las prácticas ya existentes en las instituciones educativas.
Los alumnos no entienden el sentido de pertinencia en el uso social por lo que la supervisión de la institución educativa es necesaria, los docentes pierden autoridad en el sentido de la regulación de su uso. Considero que es quien debe reeducar en el sentido de la responsabilidad y regular el uso en diferentes situaciones con objetivos y propósitos determinados del uso de celulares y otros dispositivos.
Está en la actitud del docente y las instituciones educativas el diseñar formas creativas de regular el uso de celulares más que restringir su uso y esto solo puede funcionar si se crea en el alumno ese sentido de pertenencia, si adquiere su rol individual de responsabilidad.
Milka, estoy totalmente de acuerdo contigo. Como docentes debemos estar a la vanguardia sobre la tecnología. Nuestros alumnos esperan más de nosotros, poder estar en comunicación de forma inmediata con ellos.
ResponderEliminarSelene!
Me parece muy acertado lo mencionas Milka, es importante estar a la "moda" en lo que a tecnología se refiere, para poder atacar todas las áreas de interés de los alumnos, así como conocer sus habilidades adquiridas gracias a la tecnología que los rodea.
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